EL Womanism (Mujerismo) en Alice Walker. La unidad entre las mujeres negras con el movimiento feminista en “la intersección de la opresión de raza, clase y género”.

Una mujerista es una feminista negra o una feminista de color. La activista y autora afroamericana Alice Walker ha utilizado el término para describir a las mujeres negras que están profundamente comprometidas con la integridad y el bienestar de toda la humanidad, hombres y mujeres.

Según Walker, “mujerista” une a las mujeres negras con el movimiento feminista en “la intersección de la opresión de raza, clase y género”.

Una mujerista es una feminista negra o feminista de color que se opone al sexismo en la comunidad negra y al racismo en toda la comunidad feminista.

Según la activista y autora afroamericana Alice Walker, el movimiento mujerista une a las mujeres negras con el movimiento feminista.

Los mujeristas trabajan para garantizar el bienestar de toda la humanidad, hombres y mujeres.
Mientras que el feminismo se centra estrictamente en la discriminación de género, el mujerismo se opone a la discriminación contra las mujeres en las áreas de raza, clase y género.

¿Què entiende Alice Walker por mujerismo?

El mujerismo es una forma de feminismo centrada especialmente en las experiencias, condiciones y preocupaciones de las mujeres de color, especialmente las mujeres negras. El mujerismo reconoce la belleza y la fuerza inherentes de la feminidad negra y busca conexiones y solidaridad con los hombres negros.

El mujerismo identifica y critica el sexismo en la comunidad afroamericana y el racismo en la comunidad feminista.

Sostiene además que el sentido de identidad de las mujeres negras depende igualmente tanto de su feminidad como de su cultura.

Kimberlé Crenshaw, defensora de los derechos civiles de los estadounidenses afrodescendientes y estudiosa de la teoría crítica de la raza, acuñó el término en 1989 para explicar los efectos interrelacionados de la discriminación sexual y racial en las mujeres negras.


Según Crenshaw, el movimiento feminista de la segunda ola de finales de la década de 1960 estuvo dominado en gran medida por mujeres blancas de clase media y alta. Como resultado, ignoró en gran medida la discriminación socioeconómica y el racismo que aún sufren, especialmente las mujeres negras, a pesar de la aprobación de la Ley de Derechos Civiles .

Muchas mujeres de afrodescendientes en la década de 1970 buscaron expandir el feminismo del Movimiento de Liberación de la Mujer más allá de su preocupación por los problemas de las mujeres blancas de clase media. La adopción de “mujerista” significó una inclusión de cuestiones de raza y clase en el feminismo.

¿En que año Alice Walker utilizo la palabra "mujerista"? 

Alice Walker utilizó por primera vez la palabra "mujerista" en su cuento de 1979, "Coming Apart", y nuevamente en su libro de 1983 "En busca de los jardines de nuestras madres: prosa mujerista". En sus escritos, Walker define a un "mujerista" como una "feminista negra o feminista de color". Walker cita la frase “actuar como una mujer”, que las madres negras le decían a un niño que voluntariamente actuaba serio, valiente y adulto en lugar de “niña”, como generalmente espera la sociedad.


Walker utilizó ejemplos de la historia, incluida la educadora y activista Anna Julia Cooper y la abolicionista y activista por los derechos de las mujeres Sojourner Truth . También utilizó ejemplos del activismo y el pensamiento actuales, incluidas las escritoras negras bell Hooks (Gloria Jean Watkins) y Audre Lorde , como modelos de mujerismo.

La teología mujerista centra la experiencia y la perspectiva de las mujeres negras en la investigación, el análisis y la reflexión sobre teología y ética.


Los teólogos mujeristas analizan los impactos de la clase, el género y la raza en un contexto de la vida negra y las cosmovisiones religiosas para formular estrategias para la eliminación de la opresión en las vidas de los estadounidenses negros y el resto de la humanidad. Al igual que el mujerismo en general, la teología mujerista también examina cómo las mujeres negras son marginadas y retratadas de manera inadecuada o sesgada en la literatura y otras formas de expresión.


El área de la teología mujerista surgió en la década de 1980 cuando más mujeres negras estadounidenses se unieron al clero y comenzaron a cuestionar si los teólogos negros abordaban de manera adecuada y justa las experiencias de vida únicas de las mujeres negras en la sociedad estadounidense.


Al crear una definición de cuatro partes de mujerismo y teología mujerista, Alice Walker cita la necesidad de “subjetividad radical, comunalismo tradicional, amor propio redentor y compromiso crítico”.

Mujerista versus feminista

Si bien el mujerismo incorpora elementos del feminismo, las dos ideologías difieren. Si bien ambos celebran y promueven la feminidad, el feminismo se centra exclusivamente en las mujeres negras y su lucha por lograr la igualdad y la inclusión en la sociedad.


La autora y educadora afroamericana Clenora Hudson-Weems sostiene que el feminismo está “orientado a la familia” y se centra en la discriminación contra las mujeres en contextos de raza, clase y género, mientras que el feminismo está “orientado a las mujeres” y se concentra únicamente en el género. En esencia, el mujerismo enfatiza la igual importancia de la feminidad y la cultura en la vida de las mujeres.


La frase frecuentemente citada de Alice Walker, “El feminismo es para el feminista lo que el púrpura es para el lavanda”, sugiere que el feminismo es poco más que un componente de la ideología más amplia del mujerismo.

Escritos mujeristas

Desde principios de la década de 1980, varias autoras negras destacadas han escrito sobre las teorías sociales, el activismo y las filosofías morales y teológicas conocidas como mujerismo.

bell hooks: ¿No soy yo una mujer? Las mujeres negras y el feminismo, 1981

Al examinar los movimientos feministas desde el sufragio hasta la década de 1970, Hooks sostiene que la combinación de racismo y sexismo durante la esclavitud dejó a las mujeres negras en el estatus social más bajo de cualquier grupo de la sociedad estadounidense. Hoy en día, el libro se utiliza habitualmente en cursos sobre género, cultura negra y filosofía.

“El racismo siempre ha sido una fuerza divisiva que separa a los hombres negros y blancos, y el sexismo ha sido una fuerza que une a los dos grupos”.—Bell Hooks

Alice Walker: En busca de los jardines de nuestras madres: prosa mujerista, 1983

En este trabajo, Walker define “mujerista” como “una feminista negra o feminista de color”. También relata sus experiencias durante el movimiento de derechos civiles de la década de 1960 y ofrece un vívido recuerdo de la herida que le dejó cicatrices en la infancia y las palabras curativas de su pequeña hija.

“¿Por qué las mujeres son tan fácilmente 'vagabundas' y 'traidoras' cuando los hombres son héroes por dedicarse a la misma actividad? ¿Por qué las mujeres apoyan esto?”—Alice Walker

Paula J. Giddings: Cuándo y dónde entro, 1984

Desde la activista Ida B. Wells hasta la congresista negra Shirley Chisholm , Giddings cuenta las inspiradoras historias de mujeres negras que superaron la doble discriminación de raza y género.

“Sojourner Truth, que acalló al que interrumpía con un discurso frecuentemente citado. En primer lugar, dijo, Jesús vino de 'Dios y una mujer; el hombre no tuvo nada que ver con eso'”.—Paula J. Giddings

Ángela Y. Davis. Legados del blues y feminismo negro, 1998

La activista y académica afroamericana Angela Y. Davis analiza las letras de las legendarias cantantes de blues negras Gertrude “Ma” Rainey, Bessie Smith y Billie Holiday desde una perspectiva mujerista. En el libro, Davis describe a los cantantes como ejemplos poderosos de la experiencia negra en la cultura estadounidense dominante.

“Sabemos que el camino hacia la libertad siempre ha estado marcado por la muerte”.—Angela Y. Davis

Bárbara Smith. Inicio Chicas: una antología feminista negra, 1998

En su innovadora antología, la feminista lesbiana Barbara Smith presenta escritos seleccionados de feministas negras y activistas lesbianas sobre una variedad de temas provocativos y profundos. Hoy en día, la obra de Smith sigue siendo un texto esencial sobre la vida de las mujeres negras en la sociedad blanca.

“Una perspectiva feminista negra no sirve para clasificar las opresiones, sino que demuestra la simultaneidad de las opresiones en la medida en que afectan las vidas de las mujeres del Tercer Mundo.”—Barbara Smith

Fuente: ACSUN, thoughtco