La historia se repite en Estados Unidos tras un año marcado por el debate sobre los métodos policiales y la discriminación racial.
Un nuevo video, un nuevo episodio de agresividad policial y una nueva persona afrodescendiente desarmada que muere.
Este último caso sucedió en Cincinnati (Ohio): un agente blanco de 25 años descerrajó un tiro en la cabeza a un conductor negro de 43 tras pararlo por no llevar matrícula frontal en su vehículo.
El mismo miércoles, el agente Ray Tensing fue imputado por cargos de asesinato. Ayer jueves se declaró no culpable ante una juez.
Tras varios días de investigación, la Fiscalía del condado de Hamilton difundió el miércoles un vídeo del suceso del 19 de julio grabado por la cámara que llevaba en su uniforme el policía, perteneciente a la Universidad de Cincinnati, en el Medio Oeste del país.
El fiscal Joseph Deters calificó como “sinsentido y necio” el tiroteo, en que falleció Samuel Dubose tras preguntarle el agente por qué no llevaba consigo su carnet de conducir.
Deters subrayó que el vídeo contradice la versión del policía de que la víctima actuó de un modo agresivo que le puso en peligro, y evidencia que el agente mintió cuando dijo haber sido arrastrado por el coche.
“Creo que era una excusa para la muerte intencionada de otra persona”, dijo el fiscal en una rueda de prensa. “Creo que perdió sus nervios porque Dubose no salía de su coche”.
Podría ser condenado a cadena perpetua.
Ante la ley. Tras la difusión del vídeo, Tensing se entregó a la policía y pasó la noche en una celda aislada. La universidad le despidió. Desde el tiroteo, estaba suspendido de empleo. La siguiente cita judicial tendrá lugar a mediados de agosto. El policía podría ser condenado a cadena perpetua. Su defensa tratará de demostrar que actuó en defensa propia. La ley concede una amplia interpretación a los agentes para alegar sentirse amenazado, pero la elocuencia del vídeo parece jugar en contra de Tensing, que era policía desde hace 4 años.
La grabación, de dos minutos y medio, muestra cómo el agente va impacientándose con el conductor, que se muestra calmado. La conversación se inicia con Tensing, de pie junto al coche, pidiéndole a Dubose, a través de la ventana, que le dé su carnet de conducir. Tras algunas vacilaciones, el conductor admite que no lo lleva consigo, pero insta al agente a comprobar en la base de datos que sí dispone de carnet.
En Cincinnati, cerca de 300 personas se manifestaron la noche del miércoles. El caso no es del todo insólito. La muerte en 2001 de un afroamericano a manos de la policía desencadenó varios días de violentas protestas en esa ciudad.
Fuente: ACSUN, Lic. Javier Dìaz, Telesur, eldiario.